frentemil2@gmail.com @facebook
Caracas, 25 de Mayo de 2013
BOLETIN DE NOTICIAS NRO. 271
EDITORIAL
Imputaciones militares, la venganza castrocomunista.
En días recientes la Fiscal General de la República anuncio la imputación de varios militares y civiles por estar presuntamente incursos en crímenes, desapariciones, torturas y otras violaciones a los derechos humanos ocurridos en el periodo 1958-1998, es decir, durante la llamada cuarta república.
Por instrucciones del desaparecido teniente coronel Hugo Chávez y con la propia Fiscal General al frente de ella, se designo una comisión a nivel presidencial para llevar adelante estas investigaciones.
Lo cierto es que, según la Agencia gobiernera AVN, el Ministerio Publico citó en calidad de imputado al General de División Felipe Gustavo Párraga Núñez, actualmente en retiro y quien para el año 1960 era teniente coronel del Ejército adscrito al Teatro de Operaciones No. 3 en el Estado Lara. Hace 2 días se anunció la imputación del Dr. Remberto Uzcategui, ex Director de la antigua DISIP por la misma causa.
La reapertura de estos casos ocurridos hace mas de 50 años no se podrían entender si no se analizan desde la óptica de la retaliación política, y porque, porque los enemigos de la democracia y de las Fuerzas Armadas de ayer son los mismos que a mala hora detentan hoy el poder.
La historia sirve para no repetir los errores del pasado, lamentablemente los venezolanos tenemos memoria corta y la juventud de hoy no lee historia. Hace 53 años, en 1960, se inicio en Venezuela un proceso dirigido desde Cuba por Fidel Castro y apoyado por comunistas venezolanos para acabar con la democracia que apenas se iniciaba.
Los tiranos que aun gobiernan en Cuba y que ahora se han apoderado de Venezuela y de su Fuerza Armada fueron los mismos que apoyaron financieramente y dirigieron la subversión comunista en las décadas de los 60 y 70.
El gobierno venezolano, con Rómulo Betancourt a la cabeza y con unos líderes militares dispuestos a defender la soberanía y la democracia de la amenaza castrocomunista, se organizó para enfrentar militarmente a los enemigos de la Patria. Venezuela entro en un complejo proceso de guerra de guerrillas y terrorismo que no concluyo sino hasta mediados de los años setenta con la derrota política y militar de la subversión y la culminación del proceso de pacificación conducido por el presidente Rafael Caldera.
Años después, cuando incluso el país dejo atrás esa época trágica de guerra entre los venezolanos, la Fiscal revive esos episodios y en un acto de resentimiento político más que en lograr hacer justicia, se dedica a buscar culpables de violación de derechos humanos pero de un solo lado. La retaliación es su propósito, imputa a militares y civiles que solo cumplieron con su deber en unas circunstancias donde el enemigo utilizaba el terrorismo y la guerra de guerrillas para apoderarse de Venezuela.
Pero la Fiscal General de la República omite investigar a los responsables de violar los derechos humanos de cientos de militares, policías, civiles y ciudadanos que fueron asesinados en las más de 500 acciones terroristas y subversivas que ocurrieron entre septiembre de 1960 y septiembre de 1965, cometidas por los cubanos castrocomunistas y sus aliados en Venezuela, muchos de ellos con prontuario subversivo, pero con presencia relevante en el régimen.
Allí está el detalle, la Fiscal General se equivoca cuando señala, como responsable del Ministerio Publico, que “la FAN que tenemos hoy no es la misma que aquella de la cuarta república preparada para la tortura, represión y la persecución a la disidencia”.
El Frente Institucional Militar rechaza su irresponsable señalamiento porque desconoce la historia y omite deliberadamente los miles de asesinados por el hampa desbordada, las persecuciones políticas la represión brutal contra la disidencia democrática cuyas consecuencias se evidencian con una diáspora de casi un millón de venezolanos que fueron forzados a buscar una mejor vida en el exterior. La justicia debe ser igual para todos.
No se olvide Señora Fiscal que tantos las víctimas de la subversión y el terrorismo castrocomunista de los años 60 y 70, como de la represión, la criminalidad y la persecución política de hoy tienen dolientes y exigen que también se investiguen y sancionen a los responsables. Lo que es igual no es trampa.
El Frente Institucional Militar se solidariza con los distinguidos oficiales y civiles que hoy son víctimas de una injusta acusación.-