De: Arturo Antonio Peña Uzcátegui Integrante de la Promoción de Oficiales Batalla de Taguanes (1.967) Guardia Nacional de Venezuela
Para :General de División Euro Luis Rincón Viloria Integrante de la Promoción Batalla de Taguanes (1.967) Guardia Nacional de Venezuela
Caracas, 26 de Febrero de 1.997
Recordado compañero, en los albores de cumplir 34 años de haber escogido un buen día la Carrera Militar, como estilo y forma de vida y próximos al límite de 30 años de Servicio a nuestra querida Guardia Nacional, a las Fuerzas Armadas y a Venezuela; es mi deseo, a través de esta misiva, despedirte a ti y a todos y cada uno de los integrantes de la Promoción Batalla de Taguanes, después de tan larga dedicación; como signo de amistad, de admiración y de respeto por todos, a la vez de desearles a cada uno, a sus padres, a sus esposas, a sus hijos y nietos, la felicidad plena, en los años que nos quedan.
Qué hermoso fue ser Cadete, qué grande fue ser Oficial
Cuando muy jóvenes dejamos nuestro hogar, cada uno de nosotros trajo consigo la génesis de nuestro origen, la bendición, el amor y el consejo de nuestros queridos padres y hermanos, esos recuerdos nos acompañaron siempre, cual raíz indestructible. Cuantos momentos, cuantos encuentros, cuantas despedidas dejamos atrás. En buena parte, todo ello fortaleció nuestra joven vida, llena de ilusiones, de esperanza y de retos.
Luego, la exigente disciplina del Cadete, hermosa fragua de valores y conocimientos, durante la cual la abnegación y el buen ejemplo de nuestros Instructores de Planta, terminó por definir, más que un estilo y forma de comportarse, la actitud correcta de afrontar con responsabilidad la vida.
Reciban todos ellos, familiares y maestros, mi cariño sincero y el reconocimiento por todos esos Valores que nos enseñaron, transmitieron e hicieron que lo tomáramos como nuestros.
Vino el Trabajo Profesional como Oficiales de las Fuerzas Armadas Nacionales, los cursos, las evaluaciones, los reconocimientos, los ascensos; tratamiento promocional compacto, de innumerables vivencias, de oportunidades homogéneas que, como mencionaba en una ocasión, nos colocaba cada vez en línea horizontal para emprender un nuevo reto.
Todos fuimos necesarios en la estructura militar, cada jerarquía fue tan importante como la quisimos hacer, como la quisimos sentir, pletórica de responsabilidad y henchida de grandeza espiritual.
El necesario Orden de Mérito fue la respuesta particular al esfuerzo, a la constancia y al equilibrio. Mi mas alta expresión de reconocimiento a cada uno de mis compañeros de Promoción, a los que ocuparon puestos de liderazgo durante la Carrera Militar, liderazgo expresado en múltiples formas y ocasiones; también a quienes alcanzaron las más altas jerarquías y muy en especial a Euro Luis Rincón Viloria y a Félix Francisco Rodriguez Sequera. Sin duda, ustedes siempre marcaron pauta a la luz del cristal de nuestros evaluadores.
Mi Oración para los que han fallecido, ellos ocupan el lugar de respeto de los que ya no están.
Como integrante de la Promoción Batalla de Taguanes graduada en 1.967, estoy muy orgulloso de ser uno de sus integrantes, pues nos dimos por entero al servicio de la Patria, de sus Instituciones y del Pueblo.
En lo particular, estaré eternamente agradecido a mi Guardia Nacional, pues además de servir en sus filas, de vivir y sentir sus quehaceres operativos militares y quehaceres que la distinguen como Fuerza de Cooperación, me concedió la oportunidad de graduarme como Ingeniero Civil y especializarme a nivel de Post Grado en el área de Planificación y en el área de Gerencia. Ello me llevó a representarla en diferentes escenarios en los que puse todo mi empeño para que su nombre quedara en alto. La suma de todas estas experiencias también las he aplicado después de mi prematuro retiro como Oficial Activo … y hoy sigue siendo mi sustento.
En todo caso, … en mi vida, no habrá nunca nada más grande, que haber sido Oficial de la Guardia Nacional de Venezuela ¡¡
La Guardia Nacional y Venezuela, por siempre presentes
Nuestra Institución ha evolucionado en el tiempo. Hoy contamos con una Guardia Nacional, dentro del estamento de las Fuerzas Armadas Nacionales, totalmente preparada y fortalecida para prestar los Servicios Institucionales que la Caracterizan.
Es innegable que ha habido grandes esfuerzos y grandes logros, pero el reto de competitividad y eficiencia de los años venideros obligan a internalizar y revisar a fondo todo cuanto representa respuesta a las obligaciones y bastas atribuciones dentro del marco legal.,
No me cabe la menor duda que la mejor forma de afrontar esos retos es la preparación académica de cada uno de sus cuadros: Cadetes, Guardias Nacionales, Sub-Oficiales y Oficiales.
He soñado con nuevos perfiles para nuestros Guardias Nacionales y Oficiales, en función de un exigente y global entorno; que les permitan ser verdaderos especialistas en todos los órdenes que le competen. Ello obliga a un mejoramiento integral, progresivo sostenido y constante, que habría de iniciarse con dramática prontitud.
Por otra parte, también pienso como venezolano: en el destino de nuestro País, en la justicia social, en el bienestar de todos sus estratos, en la apertura y progreso económico que permita la participación equilibrada de todos los actores, en el fortalecimiento moral, en la aplicación firme y justa de la Ley, en el equilibrio que deben tener los elementos sociales, políticos, económicos y éticos, dentro de Sistema Democrático
En este sentido, lo que se haga para alcanzar estas metas, ha de hacerse con extrema firmeza, con el concurso de la mayoría de la gente de buena voluntad, dispuesta a buscar, aceptar y emprender formulas de convivencia que permitan alcanzar propósitos comunes en beneficio colectivo. Salta a la vista la prioridad en la Educación desde el nivel Preparatorio hasta las Universidades, ello dará acceso al conocimiento, ilustrará y capacitará a nuestra juventud hacia nuevos horizontes; la prioridad en la producción propia de alimentos como factor estratégico-económico y justa respuesta a la gente del campo y al sector agro-productor; la prioridad de atender la salud colectiva de los que menos tienen, en especial la de niños y ancianos; la prioridad de rescatar y practicar sanas costumbres y valores éticos-morales; la prioridad de sostenidamente mejorar la administración de justicia; y las prioridades en cuanto a los programas de inversión en los sectores de: investigación y planificación, urbanismo, vivienda, vialidad y comunicaciones, industria y comercio, seguridad; todos en armonía con variables y parámetros que viabilicen un destino seguro y sostenible, merecido para este País que se caracteriza por poseer grandes recursos y que sobre todo clama por ello.
Es evidente que los problemas a superar son muchos, pero también podemos decir que las soluciones son múltiples. No es fácil, pero si pensamos y actuamos con decisión y firmeza serán muchos los logros. Sería un digno aporte e irrenunciable deber de nuestra generación, a las generaciones venideras.
Treinta años más tarde, Promoción Batalla de Taguanes II. Su comienzo es ahora
Jóvenes que próximamente comienzan su vida como Profesionales de la Guardia Nacional de Venezuela. Durante los últimos cinco años han recibido la formación que les permitirá desenvolverse de manera adecuada en sus Unidades Militares.
Es motivo de alegría y satisfacción para ustedes y sus familiares, alcanzar la meta de graduarse como Oficiales de las Fuerzas Armadas de Cooperación. Los felicito en forma adelantada y les deseo éxito.
Considero oportuno transmitirle unos pensamientos, recabados de mis maestros, los cuales convertí en mi propio Código. Este Código me inspiró y guió mi vida militar y espero lo tengan presente en muchos momentos de sus vidas. Reza así:
· Seré celoso defensor de la Integridad de mi Patria. Respetaré mi Carrera Militar y el entorno de las demás Fuerzas Hermanas y Poderes que conforman la Vida Institucional y Democrática de la Nación
· Los Valores Éticos-Morales y el mandato de las Leyes, serán el marco de todas mis actuaciones personales y profesionales
· Nuestros Guardias Nacionales son el bastión más importante de mi querida Institución
· Actuaré con honestidad en todos los actos de mi vida. Seré un digno y disciplinado Subalterno, un solidario Compañero y un Magnánimo Superior
· Donde quiera que me encuentre, fortaleceré y profundizaré mis conocimientos y destrezas para ofrecer un mejor Servicio Institucional
· Desarrollaré toda mi energía física y mental en cada Grado Militar, en los que seré eficiente y eficaz al frente de mis responsabilidades
· Respetaré los Derechos Humanos y sus diferentes formas de expresión. Seré firme pero cortés y accesible. Serio pero sin perder la alegría y el optimismo
· Cultivaré el amor a Dios y el amor a mi familia. Resguardaré el respeto del Pueblo. Ganaré la admiración de mis Superiores, la amistad de mis Compañeros y la credibilidad de mis Subalternos
· Cuando conforme un hogar, escogeré como conyugue a una persona que responda a mi nivel cultural, social y económico. Seré un apoyo para mi pareja y un ejemplo a toda prueba para mis hijos
· No olvidaré a mis padres y hermanos y al entorno del que provengo. Cuando me retire del Servicio Activo, seguiré sintiéndome como un miembro más de la Guardia Nacional
Reciben ustedes una Institución joven y llena de optimismo. Porque la Institución nunca envejece, porque la Institución nunca se muere; la Institución nace con el nacimiento de cada uno de sus hijos. Y ustedes, hijos predilectos y escogidos por esta Institución, están llamados a mantener en sus mentes y corazones, la llama ardiente de ese optimismo, el cual se debe traducir en un Servicio Institucional consciente, de entrega total, de ser mejores cada día. Solo de esta manera podrán entregar al final de su jornada, una Institución evolucionada y mejor.
El Reto continúa para todos
Queridos Compañeros de Promoción, nuestras aptitudes y energías están intactas … Si pudiéramos seguir … Pero el tan democrático relevo generacional no solo es conveniente, sino necesario. Estemos tranquilos. En la seguridad que los que vienen atrás, serán mejores.
¿Qué hacer ahora? … pues volver a empezar. Comenzar de nuevo, pero con mayor experiencia, con más optimismo, con más claridad y certeza. Los robles mueren de pié.
¿Por qué dar tregua? … afuera nos esperan otras actividades, otros retos. Venezuela entera es nuestra, el País nos necesita.
Dediquemos más tiempo a nuestra querida esposa y amados hijos … Cuanto tiempo les quitamos a ellos, cuantos momentos dejamos de vivir en familia, cuantas cosas dejamos de hacer. La vida militar nos envolvió a todos …
Para sus seres queridos un fuerte abrazo, les deseo todo el bienestar del mundo. Gracias por tolerarnos, gracias por ayudarnos, gracias por acompañarnos.
Pues sí … terminamos siendo lo mismo, como empezamos. Sin más recompensa que la satisfacción de un soldado ante el deber cumplido. Pero …, no olvidemos que un buen soldado, sigue siendo soldado por toda la vida … no nos podemos cansar … adelante … continuemos … hasta el fin.
Con aprecio,
Arturo Antonio Peña Uzcátegui
Integrante de la Promoción de Oficiales
Batalla de Taguanes (1.967)
Guardia Nacional de Venezuela