Muy afectados, cumplimos con el penoso deber de informar el sensible fallecimiento de nuestro muy apreciado y querido compañero, el Coronel Otto Rojas Córdoba, oficial pertenecie3nte a la promoción Pedro León Torres año 1960 al deplorar tan infausto acontecimiento, hacemos llegar a sus familiares nuestra mas sentida manifestación de condolencia. a su honorable familia.. su esposa Giomar Gil de Rojas, a sus hijos Aurober, Otto junior, John José, a sus nietos Gabriela Azpurua, Otto Alejandro Rojas, Matías Rojas Johandra Rojas, también a su hermano nuestro amigo y superior, General de División. Juvenal Rojas, al cual recordamos con afecto y a la Coronela Carmen Rodríguez, su exyerna, excelente amiga, quien, con una gran voluntad de servicio atendía diligente y afectuosamente nuestros requerimientos de medicamentos, a todos ellos , la solidaridad de la promoción Pedro León Torres, en esta hora de tristeza
El Coronel Rojas Cordoba, fue un excelente oficial de nuestra fuerzas armadas, cuyas ejecutorias, siempre se manifestaron en un trabajo, responsable, honorable y honesto, así vivirá en nuestra mente y nuestro corazón, aquel llanero, que permanentemente manifestaba su orgullo por la región, que lo vio nacer, la llanura venezolana, como decía el maestro gallegos, propicia para el esfuerzo como lo fue para la hazaña, tierra de horizontes abiertos donde una raza buena ama, sufre y espera.
Fue un hombre de una gran sensibilidad musical que nos manifestaba su arte, tocando su arpa que ejecutaba con sensibilidad y destreza muchas veces acompañado al cuatro por un nuestro querido cuervo, Virgilio Pérez Sayago. Manifiesto que cuando escribo esta humildes notas, me embarga el pesar, porque fue mi amigo entrañable. Entre otras cosas porque los dos elegimos como esposas a dos excelentes mujeres, el a Giomar y yo a Zaida. Ambas de la ciudad marinera y mariscala, la de la luna con que el sueño sueña, Cumana la primogénita del continente, la nunca bien ponderada ciudad con en el embrujo de su mar caribe, que en su visión lírica, manifestaba Andrés Eloy, cuyo fragmento les dejo. Cito- como para decirlo de rodillas-. Que bien esta que en este mar me quieras,-- que bello fue nacer en sus riveras—que bien sabrá morir en sus orillas. Si el evangelio es como estamos seguros de que es en la gracia de nuestra fe religiosa. Te llevaras a donde quiera que vayas, esta vivencias que compartimos. Descansa en paz amigo…
Atentamente, por la PPLT,
Tcnel. Cesar Rojas Briceño.