Capitán de Navío
Adolfo Añez Marcano
ESTUDIO DE PROBLEMÁTICA EN EL SUMINISTRO DE MEDICINAS A LOS AFILIADOS AL IPSFA.
PROPUESTA DE ALTERNATIVA INMEDIATA
A.- ANTECEDENTES:
1.- El MPPD, a través del Instituto de Previsión Social de la Fuerza Armada Nacional (IPSFA), firmó un convenio con la Sociedad Mercantil FARMAHORRO, c.a. con la finalidad de suplir, al personal militar, medicinas que estén amparadas por el récipe azul emitidos por las instalaciones de salud del Ministerio.
2.- El IPSFA asigna mensualmente la cantidad de QUINIENTOS BOLÍVARES EXACTOS (Bs.500,00) a cada uno de los integrantes del personal militar y a cada afiliado (Afiliado) con el objeto de cubrir el costo de las medicinas recibidas en ese mes. Este monto no es acumulativo ni transferible entre afiliados de la misma familia.
3.- El IPSFA, actualmente, posee en completo funcionamiento una dependencia administrativa encargada de efectuar los reembolsos a los afiliados por concepto de exámenes especiales, lentes, etc.
B.- SITUACIÓN ACTUAL:
1.- Desde su inicio se han presentado y se presentan numerosos inconvenientes que inciden negativamente sobre la eficiencia de este convenio y que van en detrimento de la salud y de la economía del afiliado. Entre estos inconvenientes podemos citar:
a) Muchos de los medicamentos indicados en los récipes azules no se encuentran amparados por el convenio y por lo tanto no son entregados. Existe en el personal médico la costumbre de recetar medicamentos de un determinado laboratorio por razones de conveniencia ya sea profesional o económica y prescriben medicamentos, de ese laboratorio, que no están en el petitorio. Adicionalmente se alega que el petitorio no se encuentra en concordancia con el convenio o está desactualizado.
b) En numerosas oportunidades FARMAHORRO alega no tener en existencia el medicamento en la presentación y/o dosis indicada por el médico por lo que tampoco se entrega el medicamento, aún cuando sí lo tenga en otra presentación.
c) Esta situación se torna más crítica cuando se trata de afiliados con Tratamiento Prolongado (cotillón) que en su mayoría están constituidos por medicamentos muy específicos y generalmente de costos bastante elevados. Anteriormente, el cotillón personalizado se hacía llegar en su totalidad al afiliado a su localidad de residencia. Actualmente el afiliado debe acudir con el listado de medicinas a un establecimiento FARMAHORRO sufriendo las mismas calamidades de quienes no estamos en su situación de Tratamiento Prolongado. Por lo general se retiran con menos de los medicamentos necesarios quedando pendientes los más costosos porque en su mayoría han sido retirados del convenio.
d) La red de centros militares de atención a la salud no cubre todo el territorio nacional por lo que se hace sumamente difícil la obtención de la atención médica y el consiguiente récipe azul. A esto se agrega la práctica existente en algunos hospitales militares de “racionar” los récipes azules a un determinado número por día, llegándose inclusive a establecer un día y unas horas para procurar estos récipes, excluyendo los servicios de Emergencia. Esto a todas luces es algo irracional ya que las enfermedades no tienen horario establecido para su aparición y, por otra parte obliga a los afiliados pacientes a madrugar para hacer una cola con la esperanza que le toque un récipe azul de los que se destinan para ese día. Adicionalmente, muchos de nuestros hospitales no prestan ningún tipo de servicio los fines de semana, ni siquiera emergencias.
e) Los récipes azules se otorgan por un solo medicamento trayendo como consecuencia que si a un afiliado le deben recetar más de un medicamento, solo le dan uno o dos ya que no hay suficientes récipes asignados ese día.
f) Todas estas anormalidades traen como consecuencia un enorme impacto negativo en la economía familiar ya que la adquisición de los medicamentos indicados por el médico son de uso obligatorio con el consiguiente riesgo para la salud el no hacerlo. A este punto el afiliado debe erogar de su propio peculio el importe de los medicamentos sin poder usar lo que por ley le corresponde, llegando a consumir sumas superiores a lo asignado.
g) Es de todos conocido que en la mayoría de las ciudades y poblaciones más pequeñas del país existen, y funcionan muy bien, varias franquicias o redes de farmacias que expenden la gran mayoría de los medicamentos, y ofrecen descuentos que en oportunidades llegan al 42% del costo del mismo. Muchos de los afiliados que sufrimos las fallas de FARMAHORRO acudimos a estas farmacias y, aún cuando tenemos que pagar de nuestro bolsillo, teniendo una asignación sin poder usar, logramos un considerable ahorro y, lo que es más importante, obtenemos el medicamento indicado y que el Instituto encargado del cuidado de nuestra salud no ha logrado suministrarnos.
h) Quizás la falla más visible y acentuada de este convenio es la poca cobertura territorial de FARMAHORRO. La red de farmacias FARMAHORRO está presente (según su página WEB), la cual se encuentra aen mantenimiento en estos momentos, en los siguientes estados y ciudades, con el número de establecimientos indicados:
1) Distrito Capital: Caracas (23)
2) Anzoátegui: Pto.La Cruz (1), Pto.Píritu (1), Barcelona (2), El Tigre (2)
3) Aragua: Maracay (3)
4) Barinas: Barinas (1)
5) Bolívar: Cdad. Bolívar (3), Pto. Ordaz (2), San Félix (2), El Callao (1)
6) Carabobo: Valencia (4), Naguanagua (1)
7) Guárico: San Juan de los Morros (1)
8) Lara: Barquisimeto (1)
9) Mérida: Mérida (1)
10) Miranda: Todo el estado (24)
11) Monagas: Maturín (1)
12) Nva. Esparta: Porlamar (1)
13) Portuguesa: Acarigua (2), Guanare (1)
14) Sucre: Cumaná (1)
15) Táchira: San Cristóbal (2)
16) Vargas: Naiguatá (2), Vargas (1)
17) Yaracuy: Chivacoa (1)
18) Zulia: Maracaibo (2)
Podemos observar que FARMAHORRO no posee establecimientos en seis (6) estados del país lo que representa el 25% de los estados. Estos son: Apure, Amacuro, Amazonas, Cojedes, Falcón y Trujillo. El personal militar que habita en estos estados debe trasladarse a estados vecinos a procurar los medicamentos con el consiguiente gasto de transporte, alimentación y probable pernocta, aunado al riesgo de no encontrar el medicamento indicado. Igualmente, hay estados, muchos de ellos de gran extensión territorial y numerosos afiliados, donde solo hay un establecimiento en la capital o en una de las ciudades, presentándose el problema ya descrito. Entre estos podemos mencionar: Barinas, Guárico, Lara, Mérida, Monagas, Nva. Esparta, Sucre, Yaracuy lo que significa el 29% de los estados. Los afiliados, de un estado, residentes en lugares distintos a la capital deben trasladarse a la misma con los inconvenientes que esto acarrea. De esta realidad podemos inferir que más del 50% de los estados del país poseen uno o ningún establecimiento FARMAHORRO.
C.- CONCLUSIONES:
1.- El convenio IPSFA – FARMAHORRO para el suministro de medicinas al personal militar y de afiliados al Instituto adolece de serias fallas, en cuanto a su operatividad, ya que se hace sumamente difícil conseguir la atención médica, la expedición del récipe azul por ser racionado tanto en cantidad como en tiempo de entrega, y la existencia del medicamento en los establecimientos de FARMAHORRO, donde los haya.
2.- Este primer inconveniente acarrea serios problemas y pone en riesgo la salud y la integridad física de los afiliados, y va en detrimento de sus recursos económicos ya que debe forzosamente adquirir los medicamentos y para ello, en muchas oportunidades, debe trasladarse de un estado/ciudad a otro/a. Esto se ve más acentuado en afiliados con Tratamiento Prolongado.
3.- Muchos afiliados debemos adquirir los medicamentos con dinero propio sin usar la asignación que por ley nos corresponde y que ha sido presupuestada por el IPSFA. Esto hace que nuestro egreso por este concepto sea muchas veces superior a esa asignación.
4.- Existen en todo el país redes de farmacias que ofrecen y concretan descuentos considerables en todas las medicinas, y en ellas algunos encontramos un paliativo en cuanto a los egresos que nos vemos forzados a hacer por carencias de FARMAHORRO.
5.- La cobertura territorial de FARMAHORRO es bastante deficiente al no poseer establecimientos en el 25% del país y tener una sola farmacia en un 29% del territorio nacional, mayormente en estados y ciudades densamente pobladas.
6.- Este problema no se solventaría cambiando de proveedor de las medicinas ya que no existe en el país ninguna red de farmacias con la cobertura necesaria para satisfacer las necesidades de la mayor parte de los afiliados.
7.- En caso que se decida efectuar el suministro en establecimientos propios de la FANB (IPSFA, hospitales, comandos, cuarteles, etc) tampoco estaría garantizada la existencia y entrega completa y oportuna de los medicamentos.
8.- En el edificio sede del IPSFA funciona una dependencia para efectuar los reembolsos, a los afiliados, por diversos conceptos.
D.- RECOMENDACIONES:
1.- Establecer mecanismos para ampliar la asistencia médica a los lugares donde no hay hospitales militares para la expedición del récipe azul. Esto podría lograrse mediante convenios con establecimientos privados o con médicos independientes.
2.- Eliminar la práctica de racionamiento de récipes azules, así como el tiempo para su entrega. Debe dotarse suficientemente a los establecimientos de salud para evitar los serios inconvenientes que se presentan actualmente.
3.- Hacer entrega del cotillón completo a los afiliados con tratamiento prolongado, haciéndolo llegar a su sitio de residencia ya sea utilizando los comandos de guarnición, los comandos regionales o las seccionales del Instituto de Oficiales de la Fuerza Armada Nacional en situación de retiro (IORFAN).
4.- Implantar un sistema alterno para que los afiliados puedan obtener aquellos medicamentos, soportados por récipes azules, no suministrados por FARMAHORRO. Se sugiere la siguiente opción:
a) El afiliado se presenta a FARMAHORRO con el récipe azul y solicita los medicamentos. En caso de no podérsele suministrar, solicita a FARMAHORRO la colocación de un sello, en el récipe, que deje constancia de la no existencia del medicamento.
b) El afiliado acude con el récipe sellado a otra farmacia y adquiere el(los) medicamento(s) solicitando factura personalizada a nombre del beneficiario que aparece en el(los) récipe(s) anexando esta factura al(a los) mismo(s). Este procedimiento debe hacerlo todas las veces que las circunstancias lo requieran durante el mes en curso. A fin de mes hace llegar las facturas al IPSFA, bien sea personalmente, a través de las oficinas regionales y/o las Seccionales del IORFAN, a fin de que le sea reintegrado lo gastado hasta un monto máximo igual a la cantidad asignada mensualmente.
c) El IPSFA, una vez recibidos y procesados los recaudos, procede a efectuar el correspondiente reintegro a través de la cuenta nómina del afiliado.
El afiliado a fin de desembolsar la menor cantidad de dinero buscará aquella farmacia que le ofrezca mejores precios, logrando dos cosas para sí y una para el IPSFA: Primeramente obtiene el medicamento desembolsando menos dinero en el momento. En segundo lugar, gracias a los descuentos, podrá adquirir mayor cantidad de medicinas con la asignación mensual llegando en algunos establecimientos a un 40%. De no copar el máximo de su asignación mensual, el IPSFA podría lograr ahorros que pudiesen llegar al porcentaje señalado alcanzando su verdadera función cual es el proveer al afiliado con los medicamentos necesarios para su bienestar haciendo uso de su asignación, y no deteriorando su calidad de vida al tener que erogar gastos extras ocasionados por la ineficiencia del convenio con la firma FARMAHORRO.
d) La implantación de este procedimiento no exigiría ningún cambio en la funcionalidad del IPSFA, ni carga burocrática adicional ya que actualmente existe una dependencia encargada de tramitar los reembolsos de gastos hechos por los afiliados en servicios tales como: exámenes especiales y lentes.
e) Girar, y hacer cumplir, instrucciones precisas y de obligatorio acatamiento para que el personal médico se abstenga de recetar medicamentos que no se encuentren en el petitorio acordado con FARMAHORRO.
f) Incluir nuevamente, en el petitorio aquellos medicamentos específicos para determinados tratamientos y/o enfermedades que fueron retirados, algunos por sus costos, otros sustituidos por medicamentos genéricos que no siempre son tan efectivos como los específicos, y que en lugar de ahorros solo generan más gastos y riesgos a la salud del afiliado.
g) Adicionalmente exigir a FARMAHORRO mantener en existencia, y en cantidades suficientes, los medicamentos incluidos en el petitorio del convenio. Esto no presenta dificultad alguna ya que estadísticamente ya deben existir registros de los medicamentos más indicados y la frecuencia de su solicitud.
5.- Se adjunta un flujograma a ser utilizado para concretar el procedimiento aquí descrito. El mismo podría ser usado en cualquier momento sin importar el establecimiento designado para llevar adelante el suministro de los medicamentos.